¿Cómo estudiar para un examen? Consejos

Saber cómo estudiar para un examen, permite enfocar el esfuerzo que se debe hacer y manejar de una mejor manera el tiempo a invertir, obteniendo al final el resultado esperado, que es superar el examen con una buena calificación.

Se debe tomar en cuenta que cada persona responde de manera diferente ante la presión de los exámenes, y que cada materia a estudiar se enfoca también de una forma diferente, pero las técnicas de estudio y de motivación funcionan para todos por igual y ayudan a organizar tanto física como mentalmente, el proceso de preparación para afrontar una evaluación.

Consejos para estudiar ante un examen

Lo primero que se debe tener en cuenta es que cada tipo de examen y cada materia que se va a estudiar tiene sus propias características, por eso es necesario seguir algunos consejos básicos:

• Lo más importante es comenzar con el proceso de estudio mucho antes del día del examen, realizando la planificación de las jornadas de manera objetiva.
• Se debe hacer un estimado de la cantidad de horas que se dedicaran a cada asignatura, según el grado de dificultad que represente: a mayor dificultad, más horas de estudio hay que dedicar.
• Desarrollar y fomentar hábitos de estudio que sean efectivos y útiles: como, por ejemplo, fijar las horas que se van a dedicar o preparar el lugar de estudio.
• Es primordial dedicar un número determinado de horas al día para estudiar, estableciendo incluso, un horario, en el que se dedique más tiempo a las materias más difíciles.
• Tener constancia y fijar objetivos diarios.
• Es recomendable organizar sesiones de estudio en grupos, con el fin de despejar dudas. Las sesiones pueden ser presenciales, en grupos pequeños, u online.
• Mantener hábitos de vida saludables: dormir las horas suficientes, tomar descansos, hidratarse correctamente y ejercitarse. Esto ayuda a disminuir la tensión y la ansiedad propia de los exámenes.
• Tomar un día de descanso, realizando actividades que ayuden a despejar la mente.

Principales técnicas de estudio

Tal vez se cuente con la motivación y la disciplina necesaria en la preparación para un examen, pero se desconozcan las técnicas de estudio que pueden facilitarla. Es aconsejable elegir la que mejor se adapte a la materia que se está estudiando y a las propias necesidades.

Técnica del subrayado

Esta es una de las técnicas más básicas y fundamentales en el momento de estudiar. No se trata de subrayar por subrayar, sino que se debe seguir un método:

• Lo primero es realizar dos lecturas del material, una general y otra en la que se identifiquen las ideas principales y las secundarias.
• En el momento de comenzar a subrayar, es recomendable utilizar diferentes colores para los títulos, las palabras clave y los dos tipos de ideas.
• Se debe tratar de subrayar grupos de palabras y sustantivos, con la finalidad de no acumular mucha información.
• Al terminar el proceso de subrayado, es recomendable revisar de nuevo el texto, prestando atención a todo aquello que no se entienda muy bien y si se ha dejado de lado algún concepto clave.

Técnica del resumen

Esta técnica es un poco más complicada, pero si se siguen ciertas pautas se hace mucho más fácil:

• Al momento de hacer un resumen se debe concentrar en las palabras claves y las ideas principales.
• No se debe utilizar la primera persona en el momento de redactar. También se recomienda no usar verbos en pasado.
• Evitar escribir una opinión personal, hacer una narración o una descripción.
• Se debe procurar no utilizar oraciones subordinadas o copiar citas textuales.
• No se recomienda incluir enumeraciones, ni comenzar las oraciones con preposiciones.
• Hay que darle coherencia al resumen con el uso de conectores.

Métodos para organizar la información

Manejar toda la información que se encuentra en los libros de texto puede llegar a ser complicado, siendo necesario organizarla para poder darle la coherencia necesaria para asimilar los conceptos y recordarlos de manera apropiada. El principio fundamental de organizar la información son los datos obtenidos con la técnica del subrayado y del resumen, luego a partir de una idea o un concepto clave se desarrollan las ideas principales y luego las secundarias.

Mapas conceptuales o diagramas

Representan la idea principal con una figura, por lo general un círculo o un cuadrado y luego se van relacionando con las demás ideas usando líneas o flechas. Para elaborarlo se deben seguir las siguientes pautas:

• El número de relaciones debe ser entre 15 y 25 preferiblemente.
• Cada idea o concepto que se plantee debe ser breve, de una o dos palabras.
• Se puede organizar como una lista jerárquica, en la parte superior se coloca la idea clave y después se van anotando las ideas más generales en orden de importancia.

Otra forma de representar la idea principal es con la técnica de araña, se coloca la idea o concepto principal en el centro y el resto de las ideas se colocan a los lados unidas por líneas. Sobre cada línea se escribe una palabra, por lo general un verbo, que enlazan los dos términos. Los mapas conceptuales también se pueden representar con base en un sistema de colores, en el que cada elemento se resalta en un color particular.

Esquemas

Los esquemas suelen sintetizar aún más la información, usando para ello columnas o cajas relacionadas. Se usan para simplificar la información que se obtiene de los resúmenes y del subrayado. La forma en cómo se organice va a depender del número y tipo de títulos, subtítulos y epígrafes que se encuentren presentes en el temario. Es recomendable que las ideas principales se ubiquen a la izquierda y las secundarias en el lado derecho.

Infografías

En una infografía se combinan imágenes, figuras e incluso ilustraciones, no solamente se incluye texto, sino también gráficos, tablas o mapas. Cada persona puede plasmar la información en la manera que le resulte más conveniente, adaptándose al tipo de texto que se quiere recordar para el examen. Son de tres tipos: estáticas, dinámicas (vídeos) y las de tipo interactivo.

Mapa mental

Es la síntesis de una materia por medio del uso de colores e imágenes, con la finalidad de aumentar la retención. Se comienza con una idea central, a la que se le van agregando ramas que representan las secciones del tema, y las siguientes ramificaciones serán los subapartados. Cada apartado se puede colorear y seguir esa gama para los subapartados.

Se pueden hacer dibujos que representen cada apartado o concepto secundario, con la finalidad de que se pueda visualizar mejor. Al terminar, hay que repasarlo para asegurarse de que toda la información esté representada y enlazada correctamente y que por lo tanto se puede retener con facilidad. Crear un mapa mental hace que el estudiante preste toda su atención al proceso de creación, aumentando su capacidad de aprendizaje y de retención para el examen.

Cómo estudiar para un examen

No todos los estudiantes logran mantener un ritmo de estudios que les permita mantener sus calificaciones, por muchas razones, incluyendo la falta de motivación y el no saber cómo estudiar para un examen.

Es necesario conocer mejor para un examen, siguiendo los siguientes pasos:

• Prelectura: Leer de forma detenida la materia a estudiar, con el fin de identificar cuáles son las ideas generales y las palabras clave.
• Lectura comprensiva: Hacer luego una lectura más detenida, con el fin de diferenciar las ideas principales y las secundarias. Se debe tratar de entender todas las palabras y el contenido de cada párrafo, consultando todo aquello que no se entienda, para que todos los conceptos queden claros.
• Subrayado, resumen y esquema: Sirven para organizar los conceptos. También se pueden usar los esquemas o mapas conceptuales, usando el método que sea más conveniente.
• Memorización: Se recomienda usar técnicas mnemotécnicas. También se puede hacer una explicación oral a otra persona, para comprobar que se ha retenido la información de forma correcta y que se maneja bien. Dependiendo del tiempo, se pueden memorizar solo las ideas principales o los puntos más probables a ser evaluados.
• Autoevaluación: Si se tienen errores o se presentan muchas lagunas, hay que solucionarlos rápidamente y luego hacer una autoevaluación. Esto permite poder estimar cuánto tiempo se tarda en responder un examen y si se lograron alcanzar los objetivos.
• Repaso de los materiales: Luego de que se haya fijado la información en la memoria, se recomienda leer lo subrayado y recordarla mentalmente. En este último repaso solo se debe leer, sin intentar recordar. Si se ha estudiado de la forma correcta, solo con una revisión se recordará casi todo el contenido del tema.

Si se detecta que no está funcionando el método de estudio, existe la posibilidad que se estén cometiendo errores al estudiar, como, por ejemplo, hacerlo en lugares poco adecuados, tener mucho tiempo estudiando un tema, una asignatura o repetir la información hasta saturarse mentalmente.

Estudiar según el tipo de examen

La preparación no es igual para todos los exámenes, sino que se debe adecuar a la materia a presentar:

Examen de geografía

Se debe manejar mucha información teórica, mapas físicos y políticos, gráficos, entre otra. Se puede abordar creando definiciones propias, aprender sobre el relieve o datos geográficos asociándolos a viajes, recurrir a juegos y mapas interactivos, mapas en blanco a los que se le añaden los puntos geográficos más relevantes.

Examen de idiomas

Estudiar otro idioma no debe causar ansiedad, siendo lo primero si se quiere aprender cómo estudiar inglés o cualquier otro idioma para un examen, informarse sobre la utilidad que representa estudiar un idioma, con el fin de despertar el interés por la cultura y la forma de pensar en otros países.

Otras recomendaciones son:

• Lo primero es tener seguridad y confianza, y en especial perder el temor a cometer errores.
• Leer libros, diarios o revistas en ese idioma.
• Ver series o películas subtitulados en español si se es principiante y después eliminarlos poco a poco. Esto permite conocer el acento y las formas de vocalización, además de agudizar el oído.
• De igual manera se recomienda escuchar música en el idioma a presentar, tratando de escribir las letras de las canciones.
• Aprovechar los diferentes recursos audiovisuales como la televisión, los podcasts, YouTube, u otros, con el fin de preparar las pruebas de expresión oral, escrita y las de comprensión oral y escrita.
• Imitar sonidos para interiorizarlos más fácilmente, asociando palabras con su traducción y grabarlo. Es recomendable usar diccionarios visuales, debido a que la asociación de imágenes y palabras ayuda mucho al aprendizaje y la memorización.
• Compartir actividades comunes con hablantes nativos del idioma, para practicar la escucha y el habla, así como despejar dudas.
• Realizar ejercicios de redacción y practicar todos los días, dedicándole por lo menos media hora a cada parte del examen (comprensión y expresión oral y escrita).

Examen de literatura

La mayoría de las veces los exámenes de literatura son teóricos y se deben realizar análisis críticos de los géneros literarios, incluyendo la definición y características de los movimientos literarios, los autores y las obras más importantes.

Examen de derecho

Las materias de derecho nunca deben aprenderse de memoria, sino aprender las palabras claves de las leyes, los artículos, estatutos, entre otros. También se pueden aplicar los conceptos en casos prácticos o leer sobre ellos en manuales. En los apuntes es recomendable añadir comentarios propios y señalar cuál es el contenido de más importancia.

Examen de filosofía

Al estudiar filosofía para un examen lo primero es hacer un estudio del contexto histórico, social y económico e ideológico de cada filósofo, que permita entender la filosofía de cada autor, representando esto en esquemas, mapas conceptuales u alguna otra técnica. Hacer una lista de los términos relevantes de cada autor también es otra forma de retener la información.

Examen de matemáticas

Para preparar de la forma correcta un examen de matemáticas, no se recomienda memorizar solamente las fórmulas, sino que se debe empezar por entenderlas.

También se recomienda practicar mucho y seguir algunas pautas para su estudio:

• Procurar usar un cuaderno específico para los ejercicios, ordenándolos por bloques, del más sencillo al más complejo.
• Crear diagramas a partir de los procesos que se han utilizado para resolver un problema o aplicar alguna teoría.
• Apoyarse en las aplicaciones y páginas web para el aprendizaje de la matemática.
• Leer con cuidado los enunciados, las veces que sea necesario.
• Resolver los problemas a partir del orden estipulado: primero, los paréntesis, después los exponentes y luego las operaciones de multiplicación, división, suma y resta.

Examen de física

Al prepararse para un examen de física lo primero es tener buenas nociones de matemáticas, debido a que mientras más se domine esta materia, más se entenderá la física.

Para preparar un examen de física se recomienda:

• Conocer las teorías de la física y las leyes fundamentales.
• Simplificar en la medida de lo posible las teorías o los enunciados, redactando las teorías con palabras propias y aplicando estas a las situaciones cotidianas.
• Cuando no se entienda un problema, crear un esquema y para memorizar fácilmente las leyes, las unidades y los tecnicismos, usar las tarjetas de memoria.

Examen de economía

Para estudiar economía se deben conocer sus fórmulas, ecuaciones y aplicaciones. Se debe evitar aprendérselas de memoria, es mejor aplicarlas a la vida real para poder comprenderlas a cabalidad.

Examen de biología

Se pueden estudiar los temas como anatomía de manera visual, usando imágenes o esquemas que permitan recordar la información pertinente. Se pueden imprimir imágenes o dibujos sin los nombres para luego colocárselos después de haber estudiado y colorear las diferentes partes, pero procurando que no sea una distracción.

Examen de historia

Estudiar para un examen de historia puede ser complicado por todos los nombres, fechas y hechos que se deben recordar. Algunos consejos para estudiar o afianzar los conocimientos para un examen de esta materia son:

• Ver películas o documentales en donde se hable sobre el tema que se está estudiando.
• Grabar un podcast con los apuntes y escucharlo hasta que se aprendan. Se recomienda crear dos archivos de audio: uno sin fechas para recordar solo los hechos y otro con las fechas concretas.
• Crear diagramas o esquemas que tengan todos los detalles del tema.

Estudiar para un examen es necesario conocer de qué se trata el texto, cuáles son los conceptos claves que se encuentran en él, identificar la estructura, diferenciar la idea principal y las secundarias, reconocer cuál es la conclusión del texto, los razonamientos para llegar a ella y si esta es coherente.

Técnicas de estudio para un examen en poco tiempo

La mayoría de los estudiantes estudian de forma pasiva, leyendo una y otra vez una información con la finalidad de retenerla. Por lo general al terminar de hacer la lectura ya no se recuerda gran parte de la información. Se debe aprender a estudiar, involucrándose en el proceso, con la finalidad de retener la información por mucho más tiempo.

Hay que aprender a reconocer el sentido de cada materia, cuál es su aplicación y utilidad en la vida real. Relacionar la información nueva que se adquiere con algo que ya se conozca, debido a que las asociaciones y analogías favorecen el aprendizaje.

También es necesario conocer y aplicar técnicas de mejora de la memoria, que harán más fácil estudiar el contenido en menos tiempo, lo que es útil cuando se asignan exámenes de última hora o extraordinarios. Las dos técnicas que se indican a continuación tienen como finalidad facilitar la comprensión y la retención a largo plazo.

Técnica Feynmann

Esta técnica se basa en la ilusión del conocimiento, es decir en la falsa creencia de que ya se sabe algo que se ha estudiado, pero no se sabe cómo explicarlo.

Consiste en los siguientes pasos:

• Seleccionar el tema que se quiere aprender.
• Explicar la materia, basándose en el principio de que aprender implica leer, entender en qué se basa la escritura y dominar una materia para poder enseñarla. Se debe desarrollar el tema de forma escrita u oral. Luego, escribir sobre el tema y luego explicarlo de forma oral a una persona que no conozca del mismo, procurando que entienda lo que se le está comunicando.
• Identificar y repasar los puntos en los que se ha fallado, en el caso de que la persona no entienda o si no se puede explicar apropiadamente.
• Simplificar todo, dividiendo la materia en secciones y hacerlo lo más ameno posible, utilizando analogías y metáforas.

Técnica SQ4R para estudios largos

Es la técnica indicada cuando se tiene que estudiar materias muy densas, como historia, literatura y consiste en seis pasos:

• Survey (reconocimiento): Leer con atención títulos, subtítulos, epígrafes, imágenes y gráficos, con la finalidad de obtener una visión global de todo el tema o sección.
• Question (pregunta): Realizar todas las preguntas posibles a partir de lo que se ha leído en el primer paso.
• Read (leer): Leer cada párrafo dos veces, la primera de una forma rápida y la segunda más detenida, procurando retener la mayor cantidad posible de información.
• Recite (recitar): Recitar en voz alta las preguntas y responderlas sin ver la teoría. Si se presenta un bloqueo y no se recuerda la respuesta, se debe hacer un repaso.
• Rewrite (reescribir): Responder a las preguntas de nuevo, pero por escrito y de forma más sencilla y concreta, usando palabras claves y citando las ideas principales. Se puede recurrir a listas, esquemas, dibujos, entre otras técnicas.
• Review (revisar): Revisar los títulos, preguntas y respuestas sin consultar la materia, despejando las dudas consultando manuales, libros de texto, revistas y cualquier otro material.

Estudiar para un examen tipo test

No se debe estudiar igual para un examen tipo test que para un examen de desarrollo. Hay que dar mayor importancia a la memoria de reconocimiento, reconocer los detalles que marcan la diferencia entre varias opciones de respuesta. Memorizar solo fechas, leyes, nombres propios o palabras técnicas. Estudiando modelos de exámenes de otros años, se puede determinar cuáles son las preguntas que se repiten más, además de conocer qué conceptos o información son prioritarios.

Examen tipo test para oposiciones

Existen muchas páginas en Internet en las que se pueden realizar test de prueba para diferentes oposiciones y recibir los resultados. Se puede conocer cuáles fueron los aciertos y los fallos. Permite aprender a controlar el tiempo de respuesta de todo el examen o de un bloque de preguntas.

Pasos para abordar un examen tipo test

Los pasos para enfrentar un examen tipo test son:

• Analizar bien la pregunta y las opciones de respuesta. Muchas veces las respuestas son parecidas, por lo que hay que examinar bien todas las palabras. Si no se tiene claro cuál es la respuesta correcta, hay que descartar las que se conozcan con seguridad.
• No quedarse estancado en una pregunta. Cuando se tiene dudas es mejor pasar a la próxima pregunta y tratar de responder luego.

Estudiar para un examen de admisión o final

Al prepararse para presentar un examen de admisión a la universidad o un examen final, lo primero que se debe hacer es organizar el tiempo, con el objetivo de no olvidarse de ningún apartado, tema y asignatura.

Los consejos al estudiar para este tipo de examen son:

• Organizar los temas en una lista de actividades, que estén divididas por materias, tener un calendario en dónde anotar las fechas de examen y una agenda para anotar las actividades relacionadas con el estudio.
• Establecer las horas de estudios, dividiendo los temas por importancia y dificultad.
• Utilizar técnicas para memorizar información nueva fácilmente y durante más tiempo. Algunas personas recurren a la mnemotecnia para aprender conceptos o nombres de memoria.

Se pueden aplicar técnicas para hacer que el proceso de estudio para este tipo de exámenes sea mucho más efectivo, como estudiar el tema y luego explicarlo, crear grupos para intercambiar información y despejar dudas en las redes sociales, tratar de condensar la información por temas en una sola hoja, apoyándose en dibujos, esquemas y otras herramientas.

Ayudar a los niños a estudiar para un examen

Cuando se trata de estudios, los niños deben seguir las mismas pautas para preparar un examen que los adolescentes y los adultos, en cuanto a técnicas de estudio, de concentración y de relajación. Pero lo más importante es fomentar los hábitos de estudio desde el principio de su vida escolar, para que sean independientes durante su desarrollo académico.

Es importante tener en cuenta las siguientes indicaciones:

• Motivar al niño a estudiar, haciendo que comprenda la importancia de fijarse metas, objetivos; y fomentando el compromiso y la curiosidad por el aprendizaje.
• Enseñar al niño que los estudios son la prioridad.
• Brindar las herramientas necesarias para que desarrolle una buena educación emocional, que tenga confianza en sí mismo y sepa cómo hacer frente a las frustraciones.
• Limitar el tiempo de actividades que puedan ser una distracción, como puede ser el uso de la tableta y el móvil.
• Las técnicas de estudio a utilizar son las mismas (resúmenes, esquemas, aprender a explicar la lección a otra persona), pero con los padres o tutores implicados en el proceso de estudio, procurando hacer que su método de estudio sea mucho más dinámico y entretenido.
• Promover la lectura comprensiva y diaria desde que aprenda a leer, para que pueda desarrollar la expresión oral y escrita.
• Trabajar las competencias matemáticas con juegos.
• Ayudarlo a memorizar palabras o conceptos a través de canciones o poesías y también estimular la memoria visual con la pizarra o herramientas interactivas.
• El tiempo de estudio no debe superar la media hora al día, para no causarle saturación.
• En caso de que no supere un examen, se debe animar a que continúe aprendiendo, valorando el esfuerzo que ha realizado.
• Si aprueba, elogiarlo o premiarlo por ello.

Estudiar para un examen en un día y en poco tiempo

Puede darse el caso, que, por diferentes causas, ya sea debido a una gran cantidad de trabajo, un exceso de las actividades extraescolares o por falta de tiempo, poca motivación o por tener una mala planificación, se debe retardar el proceso de preparación para un examen.

En esta situación se debe estudiar para un examen un día antes de presentar, por lo que es necesario seguir estas recomendaciones para realizar un estudio efectivo:

Aumentar la asimilación de información

Se debe aumentar la memorización de fechas o conceptos claves, usando diferentes métodos de asimilación, como por ejemplo leer en voz alta o escribir a mano. Realizar la lectura en voz alta hace que se involucre en el proceso de estudio al sentido de la vista y del oído. Escribir a mano implica que se debe hacer más esfuerzo y prestar más atención que escribir en el ordenador.

Aumentar la velocidad de comprensión

Es recomendable estimular los sentidos viendo películas, documentales o recurriendo al uso de materiales educativos como vídeos, infografías, mapas o gráficos. Esto permite que se tenga una visión más general del tema o de la materia que se está estudiando, lo que contribuye a que se tenga una comprensión más rápida y una memorización más efectiva.

En el caso de que se quiera mejorar la memorización visual, se puede recurrir a las tarjetas de memoria en las que se combinan diferentes métodos de memorización, como por ejemplo la escritura a mano y la distinción por colores, mientras se escribe y usa la lectura en voz alta haciendo un repaso del temario. Además, esto también permite que se refuerce la capacidad de síntesis, en la que se requiere que haya una comprensión total del tema.

Favorecer la memorización

También se deben aplicar técnicas que permitan aumentar la retención de información, como realizar la grabación de audio explicando los temas. Escuchar los temas varias veces favorece la memorización.

Estudiar para un examen, sin importar el tipo, requiere que se organice el proceso de estudio desde el principio, estableciendo pautas que ayuden a lograr una rutina de estudio y utilizando herramientas que permitan medir la evolución del estudio. Se debe procurar hacer del estudio una actividad más lúdica, en la que se estimulen los sentidos, haciendo que el proceso de retención de información se realice de una forma mucho más natural. De esto depende que se puedan superar los exámenes, ya sea de una materia en especial o para ingresar a la universidad.