La dictadura franquista (1939-1975) - Bloque 11 EBAU 2024

La dictadura franquista, también conocida como el régimen del General Francisco Franco, fue un periodo de la historia de España que abarcó desde 1939 hasta la muerte de Franco en 1975. Durante estos años, España estuvo gobernada por un régimen autoritario y represivo que ejerció un control férreo sobre la sociedad y limitó las libertades políticas y civiles.

Índice

    La creación del Estado franquista. Grupos ideológicos y apoyos sociales. Etapas de la dictadura y principales características de cada una de ellas. El contexto internacional: del aislamiento al reconocimiento exterior

    Franco

    La creación del Estado franquista

    Tras el fin de la Guerra Civil en 1939, Francisco Franco se consolidó como el líder indiscutible de España y estableció un régimen autoritario que se conocería como el Estado franquista. Franco asumió el título de "Caudillo de España por la gracia de Dios" y se convirtió en el Jefe del Estado y del Gobierno. A partir de ese momento, comenzó a ejercer un control absoluto sobre todas las instituciones y aparatos del Estado, estableciendo una estructura de poder jerárquica y centralizada.

    Grupos ideológicos y apoyos sociales

    El franquismo contó con el apoyo de una amplia coalición de grupos ideológicos y sociales. Uno de los principales pilares del régimen fue la Falange Española Tradicionalista y de las Juntas de Ofensiva Nacional Sindicalista (FET y de las JONS), un partido de corte fascista fundado por José Antonio Primo de Rivera. La Falange abogaba por un Estado totalitario, nacionalista y anticomunista, que exaltaba los valores de la patria, la religión católica y la unidad de España.

    Además de la Falange, el franquismo también contó con el apoyo de sectores conservadores y tradicionalistas, así como de la Iglesia Católica. Los sectores monárquicos también mostraron su apoyo al régimen, con la esperanza de que Franco restaurara la monarquía en el futuro. Por otro lado, el ejército y las fuerzas armadas fueron un pilar fundamental para la consolidación del Estado franquista.

    Etapas de la dictadura y principales características

    La dictadura franquista atravesó diferentes etapas a lo largo de sus casi cuatro décadas de existencia:

    La etapa del régimen totalitario (1939-1959)

    Durante los primeros años de la dictadura, el régimen impuso una política represiva y de eliminación de cualquier forma de oposición. Se persiguió a los opositores políticos y se llevaron a cabo numerosas ejecuciones y represalias. Se instauró una censura férrea sobre los medios de comunicación y la libertad de expresión fue prácticamente inexistente.

    La etapa de la autarquía (1939-1959)

    A nivel económico, el régimen implementó una política de autarquía, buscando la autosuficiencia y reduciendo las importaciones. Se promovió la producción nacional y se controló rigurosamente el comercio exterior. Esta política, aunque logró mantener a España aislada de los conflictos internacionales, también provocó una escasez de productos y un estancamiento económico.

    La etapa del desarrollismo (1960-1975)

    A partir de los años 60, el régimen inició una apertura económica y se abrió al comercio internacional y la inversión extranjera. Se impulsaron grandes obras públicas y proyectos de desarrollo económico, lo que permitió un crecimiento económico significativo. Esta etapa se conoció como el desarrollismo, pero a pesar del crecimiento económico, la desigualdad social y la represión política continuaron siendo una constante en la sociedad española.

    El contexto internacional: del aislamiento al reconocimiento exterior

    Tras la Segunda Guerra Mundial, el franquismo se encontró aislado internacionalmente debido a su vinculación con los países fascistas durante la contienda. Sin embargo, a partir de los años 50, el régimen buscó mejorar sus relaciones exteriores y se abrió a la inversión extranjera y al comercio internacional. España fue aceptada en organismos internacionales como la ONU y la OEA, lo que significó un reconocimiento internacional al régimen franquista.

    No obstante, el aislamiento internacional no desapareció por completo, ya que España continuó enfrentando críticas y condenas por parte de algunos países y organizaciones internacionales debido a las violaciones de los derechos humanos y la falta de libertades políticas y civiles. A pesar de ello, algunos países occidentales optaron por mantener relaciones diplomáticas con España debido a su posición estratégica durante la Guerra Fría y a los intereses económicos que mantenían en el país.

    Política económica del franquismo: de la autarquía al desarrollismo. Transformaciones sociales: causas y evolución

    Franco

    Política económica del franquismo: de la autarquía al desarrollismo

    Durante los primeros años de la dictadura franquista, el régimen impuso una política económica de autarquía, que buscaba la autosuficiencia económica y reducir la dependencia del comercio exterior. Esta política estuvo enmarcada en la etapa de aislamiento internacional del régimen y tuvo como objetivo principal hacer frente a las dificultades económicas tras la devastación de la Guerra Civil.

    Para lograr la autarquía, se aplicaron medidas como la intervención estatal en la economía, el control de los precios y salarios, y la limitación de las importaciones y exportaciones. Se fomentó la producción nacional y se impulsaron proyectos de desarrollo industrial para reducir la dependencia de productos extranjeros.

    Sin embargo, la autarquía llevó consigo consecuencias negativas, como la escasez de productos y la falta de innovación tecnológica. A medida que pasaron los años, el régimen se dio cuenta de que era necesario cambiar su política económica para asegurar un crecimiento sostenible y modernizar el país.

    A partir de los años 60, España experimentó una nueva etapa económica conocida como el desarrollismo. Durante esta fase, el régimen se abrió al comercio internacional y fomentó la inversión extranjera. Se llevaron a cabo grandes proyectos de infraestructuras, como la construcción de carreteras y presas, para mejorar la conectividad y la producción industrial. También se incentivó el turismo, convirtiéndose en una importante fuente de ingresos para el país.

    Transformaciones sociales: causas y evolución

    La política económica del franquismo tuvo un impacto significativo en la sociedad española. Durante la etapa de la autarquía, se produjo una escasez de productos y una restricción de las libertades individuales. La censura y la represión política afectaron la vida cotidiana de los ciudadanos, y cualquier forma de oposición al régimen fue duramente reprimida.

    Sin embargo, con el inicio del desarrollismo en los años 60, la economía experimentó un crecimiento significativo y se produjeron cambios en la sociedad española. Se produjo un proceso de urbanización acelerado, con una migración masiva del campo a las ciudades en busca de empleo en las industrias emergentes. Esto llevó a una transformación en el modo de vida y en las estructuras familiares.

    El desarrollismo también tuvo un impacto en la educación y la cultura. Se impulsaron políticas para fomentar la educación básica y se crearon universidades y centros de investigación. La cultura y las artes también experimentaron un período de renovación y creatividad, aunque siempre bajo la mirada vigilante de la censura del régimen.

    Sin embargo, a pesar de los avances económicos, persistieron desigualdades sociales. La brecha entre ricos y pobres se mantuvo amplia, y la clase trabajadora continuó enfrentando condiciones laborales precarias. Además, la represión política y la falta de libertades civiles generaron un clima de descontento y desafección hacia el régimen, especialmente entre las nuevas generaciones que demandaban mayores libertades y una participación más activa en la vida política del país.

    La oposición a la dictadura: principales grupos y evolución en el tiempo. La crisis del franquismo desde 1973 a la muerte de Franco

    Muerte Franco

    A lo largo de la dictadura franquista, surgieron diversos grupos de oposición que lucharon por la restauración de la democracia y la libertad en España.

    En los primeros años de la dictadura, la oposición estaba prácticamente silenciada y reprimida por el régimen. Sin embargo, a medida que pasaron los años, comenzaron a surgir movimientos de resistencia y protesta.

    Entre los principales grupos de oposición se encontraban los comunistas y socialistas, que luchaban por la instauración de un sistema democrático y socialista en España. También había grupos nacionalistas, especialmente en Cataluña y el País Vasco, que buscaban la autonomía de estas regiones.

    A partir de los años 60, la oposición al régimen se hizo más visible y organizada. Se crearon sindicatos y asociaciones clandestinas que luchaban por los derechos laborales y civiles, y se llevaron a cabo protestas y huelgas en demanda de libertades políticas.

    La crisis del franquismo se agudizó a partir de la década de 1970, especialmente a raíz de la crisis económica y la falta de una sucesión clara tras la muerte de Franco. Esto llevó al régimen a abrir un proceso de reformas políticas y a la promulgación de la Ley para la Reforma Política en 1977, que abrió el camino a la restauración de la democracia en España.

    La dictadura franquista fue un periodo de la historia de España caracterizado por un régimen autoritario y represivo, que ejerció un control absoluto sobre la sociedad y limitó las libertades políticas y civiles. Durante su existencia, el régimen experimentó distintas etapas y políticas económicas, y enfrentó una creciente oposición que finalmente condujo a su crisis y a la apertura hacia la democracia.

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